El autoconsumo fotovoltaico hace referencia a la producción de electricidad para el propio consumo, a través de módulos solares fotovoltaicos.
Hasta la fecha parecía que la energía solar fotovoltaica y su ahorro era una tecnología reservada a viviendas unifamiliares, que disponían de superficie en tejado o terreno. Con la aparición de los microinversores, este escenario cambia como veremos, creando un nuevo paradigma en las ciudades.

El Real Decreto 244/2019 no solo permite la opción de compensar los excedentes en factura, sino que además da la posibilidad de realizar instalaciones colectivas. En el caso residencial podemos tener una única instalación en cubierta, repartiendo después la energía generada por cada piso, en función de un coeficiente preestablecido. Hasta aquí nada nuevo, pero como todos sabemos no siempre es fácil ponerse de acuerdo con el vecino… ¿Qué otras opciones existen para un particular que vive en un bloque comunitario?, la respuesta en el siguiente pdf.

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